El pasado 30 de enero en el auditorio del edificio corporativo de Sant Cugat se inició una nueva edición del ciclo DisruptIA mediante el cual Banco Sabadell quiere poner al alcance de todos sus empleados la revolución de la Inteligencia Artificial. Estas sesiones se graban y difunden en vídeo y se ponen posteriormente al alcance de cualquier persona que pueda estar interesada en profundizar en las implicaciones y aplicaciones de la inteligencia artificial, que ya nadie duda que está destinada a modificar profundamente el día a día tanto de empresas como de particulares.
La primera charla de esta nueva edición la pronunció Álex Bayón, CEO de la empresa Brain & Code y hasta hace poco tiempo vicerector de Relaciones Internacionales y Transformación Digital de la Universidad de Deusto. Brain And Code es una empresa de educación tecnológica que ofrece programas personalizados y abiertos sobre temáticas tan diversas como la IA, programación y desarrollo web, ciberseguridad y apps de móvil entre otros. Es también profesor en el área de Economía y Transformación Digital en la Facultad de Ingeniería y la Business School de la Universidad de Deusto (Bilbao).
En muchas tareas, la eficacia de la IA ya es superior a la de las personas
Con el título “Aprendiendo a convivir con la Inteligencia Artificial”, durante su charla detalló un gran número de aspectos en los cuales la IA (que en su opinión habría que definir como “Inteligencia Digital”) ya está impactando en las empresas, tanto de forma positiva como negativa. Inició su exposición detallando una serie de tareas repetitivas en las cuales estas tecnologías ya han demostrado una eficacia superior a la de las personas. Entre otras:
- Reconocimiento de imágenes
- Generación de código informático
- Redacción de textos jurídicos
- Realización de resúmenes textuales a partir de vídeos
Lógicamente, esto ya está impactando de forma directa en cada vez un mayor número de departamentos de las empresas. Legal, Marketing o Recursos Humanos por citar solo algunos.
A modo de ejemplo, explicó como en su empresa ya se utilizan los cursos que algunas de las mayores importantes universidades del mundo ofrecen de forma pública y gratuita para elaborar materiales didácticos en formato de texto. Tan sólo hay que proporcionar a la IA adecuada la URL del vídeo y esta se encarga de transcribirlo, resumirlo, convertirlo en un texto didáctico e incluso traducirlo de forma automática a otros idiomas. Todo, sin intervención humana.
Riesgos de utilizar tecnologías como la Inteligencia artificial de forma indiscriminada
Como contrapunto a la evidente mejora en la productividad que comporta este tipo de herramientas como ChatGPT o Gemini, hizo también referencia a algunos de los principales riesgos de utilizarlas sin implantar también las necesarias medidas de control.
Uno de ellos sería confiar ciegamente en los resultados que nos ofrecen sin que estos sean supervisados por una persona. “Hay que recordar siempre”, dijo, que estos sistemas son “copilotos” que nos ayudan a ser más ágiles. No son pilotos a los que se pueda confiar el control de la nave.
Otro riesgo importante, sobre todo para las mayores empresas, es utilizar sistemas de IA de los que no tengamos la absoluta seguridad de que los datos de los cuales se alimentan han sido obtenidos de forma legítima. Se han empezado ya a dar casos de alguna gran empresa que ha sido requerida por las autoridades para que justificasen de donde provenían los datos de las IA que estaban utilizando.
Lo que viene es una ola que lo transformará todo -dijo- pero no es un apocalipsis laboral tal y como algunos medios difunden desde hace un tiempo. Está claro que debemos adaptarnos al nuevo entorno, pero la intervención humana como mínimo hoy, sigue siendo imprescindible.
La importancia de saber desarrollar nuestros sistemas de IA personalizados
Para aprovechar al máximo la IA lo primero que todos debemos hacer es detectar cuál de los múltiples sistemas existentes se adapta mejor a nuestras necesidades. No hay unos mejores que otros. Hemos de buscar el que mejor servicio nos pueda dar. Una vez detectado tendremos que “entrenarlo” durante un tiempo para que nos conozca y conozca nuestras necesidades. Como paralelismo dijo que cada una de nuestras herramientas de IA personalizadas sería algo parecido a un niño pequeño al que durante un tiempo hemos de educar hasta que se convierte en adulto.
Alex Rayón, CEO de Brain & Code “Los estudios indican que, en poco tiempo, gran parte de los trabajadores habremos entrenado ya a 24 sistemas de IA personalizados que nos ayudarán en nuestro día a día”
Hay estudios que indican que en breve buena parte de los trabajadores habremos “entrenado”, como media, unos 24 “agentes de IA personalizados” que podrán interactuar entre ellos y a los que ya, hoy, podemos dar órdenes de forma verbal que comprenden y ejecutan de forma perfecta.
Durante su charla, que está íntegra y disponible en el vídeo que se adjunta en el enlace al final de este texto, aportó también múltiples ejemplos prácticos de aplicaciones de la inteligencia artificial y algunas herramientas gratuitas y poco conocidas que ya hoy en día pueden empezar a utilizar tanto empresas como particulares.
Para ver la sesión íntegra sobre la Inteligencia artificial, seguir este enlace.